"No todo en la vida es el dinero", eso dicen muchos y quizás fue la frase que esta oportunidad aplicó un taxista de Santa Marta, quién sacó la cara por su gremio, que por estos días ha sido bastante criticado por hechos de agresiones y abusos a los pasajeros.

Se trata de Diógenes Iguarán Barros, quien lleva muchos al frente del volante y si bien su labor no genera muchos ingresos, le ha dado para sacar adelante a su familia y todos los días agradece a Dios por su trabajo.

Pero hace pocas horas, la vida puso a prueba sus valores frente a la necesidad del dinero. Este hombre, sin dudarlo, optó por lo que él considera correcto, encontró una billetera con dinero y la devolvió.

Pese a haber tenido una jornada laboral bastante dura y de esas que él considera bien malas y que quizás el dinero que se encontraba en la billetera que uno de sus pasajeros había dejado en el taxi podría ayudarle, Diógenes no se dejó ganar de la necesidad y por el contrario optó por respetar sus principios y comenzó con la búsqueda del dueño.

Mientras el taxista, con angustia intentaba dar con el paradero de su pasajero, del otro lado se encontraba un hombre y su familia, quienes estaban desesperados por lo que les había sucedido, pues ellos pensaban “en esta época ya nadie devuelve nada, perdimos la plata y los papales”.

Pero la sorpresa fue grande para Antonio Zegarra, dueño de la billetera, cuando fue localizado por el taxista que horas atrás le había prestado un servicio que califica como "excelente".

"Mi esposa y yo nos sorprendimos cuando por Facebook alguien escribió y manifestó que era familiar del taxista que nos había hecho varias carreras y este quería devolvernos unos elementos olvidados", contó con alegría.

"No lo podíamos creer, en estos tiempos nadie hace eso, de todas maneras nos pusimos felices a la espera de recuperar nuestras pertenencias", agregó.

Y así fue, Diógenes quería regresar el dinero, pero no sabía cómo hacerlo, pues, en la billetera no había un número de teléfono. Afortunadamente los documentos permitieron identificar a su pasajero, y el longevo taxista le pidió a uno de sus hijos que lo ubicara por medio de las redes sociales.

En cuanto se logró el contacto, el hombre les pidió la dirección y en cuestión de minutos se dirigió a la casa de Antonio a devolverle lo que había olvidado.

En agradecimiento con el conductor por su acto de nobleza y transparencia, el usuario le entregó en recompensa 150 mil pesos y lo nombró conductor oficial de su familia. "Que gran hombre, merece nuestro respeto y admiración, nos deja una gran lección de honradez", resaltó Antonio en medio de la felicidad.